Para 2 personas:
• 500 g de Níscalos
• 400 ml Aceite de Girasol
• 15 g de Ajo
• 300 g Calabaza
• 100 g cebolla
• sal
En primer lugar limpiamos los níscalos y sofreímos el ajo con un poco de aceite. Añadimos los níscalos troceados y cubrimos de aceite.
Los dejamos confitando a fuego bajo hasta que se ablanden.
Por otro lado elaboramos una crema de calabaza, pochamos bien la cebolla y añadimos la calabaza en dados, dejamos que se cocine y evapore gran parte del líquido. Trituramos y colamos.
Para terminar, pasamos los níscalos por un colador eliminando así el exceso de grasa, los ponemos en una sartén y cubrimos con la crema de calaba hasta que hierva. Ponemos a punto de sal y dejamos que se ligue bien la salsa.
En un plato hondo disponemos los níscalos cubiertos por la crema de calabaza.